martes, 1 de diciembre de 2015

01 - 12 - 2015

Y... más de un año sin escribir por aquí.

Ha pasado un largo tiempo y, una vez más, ha estado plagado de cambios: mejores o peores; pero todos ellos necesarios para poder seguir mi camino y evolucionar como persona.

La razón por la que hoy vuelvo a escribir aquí es, simplemente, pura gana de hacerlo.

Sí es cierto que tengo muchas cosas que contar; pero también sé que a pocas personas les interesa saber lo que pienso o están dispuestas a leer lo que realmente escondo bajo mi piel.

Como tema de reflexión, hoy quiero hablar sobre lo molesto que resulta saber que una persona prejuzga a otras por puro miedo, desconocimiento o ideal imbuído por los límites de las mentes cerradas.

Hace apenas un mes, ha habido un tema muy controvertido respecto a las religiones, las razas y los pensamientos de un grupo muy concreto de personas. Hasta ahí todo bien, todo correcto... el problema ha sido la forma que se ha tenido de llevarlo mucho más allá de lo que debiese.

Nunca he sido una persona que haya visto, ni clasificado, a nadie por su color de piel, lugar de origen o religión; es más, considero que este mundo es bello y rico a nivel socio-cultural precisamente gracias a estas variantes que tenemos dispersas por todo el mundo.

No obstante, como persona que respeta y ama, no puedo tolerar, ni aprobar, ningún tipo de acto que pretenda romper la paz, que amenace o sesgue vidas indiscriminadamente o trate de dictaminar a gente de bien que nunca ha pensado en hacer daño a otros.

No hablo de inocentes o culpables... ambas palabras son pura ficción en la sociedad de hoy en día; o al menos así lo veo... podría citar la famosa frase de "El hombre nace puro y la sociedad lo corrompe".
 Y es que la siento bastante certera, y más en estos momentos donde me cuestiono tantos aspectos de mi joven y extraña vida.

Desde pequeños nos educan para competir entre nosotros (supuestamente ayudándonos, lo siento; pero, desde que era una cría, no he visto a nadie que me haya ayudado del modo que se supone que nos enseñaban, ni siquiera yo pude conseguirlo pese a poner todas mis fuerzas en ello... y no eran pocas precisamente). La pregunta es, ¿enseñaremos algún día las cosas verdaderamente importantes a nuestras próximas generaciones? ¿Sabrán que el amor es un sentimiento mucho más poderoso y fuerte que el odio? ¿Podrán conocer la satisfacción que produce compartir lo que tienes con alguien más? ¿Conocerán el significado de la palabra "solidaridad" más allá de un diccionario? ¿Elegirán el bien por encima del mal sin tener en cuenta los dogmas de cualquier religión?

Estas absurdas preguntas (y otras tantas más) no dejan de sonar por mi cabeza... y sí, digo absurdas por un simple motivo: he llegado al punto de cuestionar mi fe en todo aquello que se supone que sirve para EDUCAR y ENSEÑAR a los humanos para conducirlos a un mundo mejor.

Concluiré diciendo que no, no pretendo decir con esto que me crea mejor que nadie... porque no soy mejor que nadie, ni nadie es mejor que yo; pero todos parecemos olvidarlo a la medida que trascurren nuestras vidas... y eso, tengo que decir, es muy triste.

De modo que, para finalizar y zanjar el tema... ¿tanto costaría que todos pensásemos un poco más en local para mejorar el mundo en el que vivimos?

No hay que olvidar que granito a granito se hace la montaña.


Gracias por vuestro tiempo.

Lady Yцϰєα

 

lunes, 14 de abril de 2014

14 - 04 - 2014

No os sorprendáis de que no hable sobre el día de la república y demás, si me conocéis lo suficiente sabréis que no hablo de política...

La entrada de hoy, este pequeño texto de reflexiones que aportaré a mi blog, es sólo otro conjunto de palabras sobre lo que pasa por mi cabeza y quiero plasmar en algún lugar en el que nada ni nadie lo pueda interrumpir, ni olvidar.

Últimamente me he enfrentado a varios tipos de situaciones que no son precisamente muy comunes en mi actual ambiente; he tenido de todo: rumores falsos sobre mi vida amorosa, rumores de que si he dicho o dejado de decir auténticas gilipolleces, rumores acerca de mi familia... en fin, de todo, ha sido como un poco exagerado y cebado todo.

De normal lo dejaría correr, y de hecho voy a dejar correr la mayoría; pero sí hay algo que me gustaría aclarar y, aunque pocos vayan a leer esto, al menos esos pocos tengan la ocasión de decidir por sí mismos si quieren, o no, reflexionar sobre lo que voy a escribir.

En primer lugar, no entiendo por qué la gente tiene esa impetuosa necesidad de meterse en mi vida de un modo tan brusco, desmesurado y completamente irrespetuoso. Sé que muchas de las personas que han empezado esos rumores son gente cuyo pasatiempo es dedicarse a hacer estas cosas (y no me sorprende); pero no entiendo cómo es posible que, después de tanto tiempo dedicándose a ello, y viendo que me la suda mucho que la gente hable de mí, aún tienen ilusión por seguir con eso.

Lo cual me lleva al segundo punto, ¿tan complicado sería que, puestos a inventar cosas y difundir rumores falsos, fuesen un poco más originales? Quiero decir, yo me voy a enterar igual, al menos podrían ser cosas más divertidas y entretenidas que simples frases comunes que ya se han utilizado antes. No sé, podríais incluir un dragón, una nave espacial, un oso polar... no sé, algo nuevo.

Por último y para acabar ya con esto un poco, me gustaría que, si esas personas llegan a leer esto, entendiesen una cosa: sí, es entretenido ver cómo todavía hay tanta obsesión con lo que hago y digo; pero, ¿de verdad que os hace tanta falta ser así? ¿Tan poco os gustan vuestras vidas? ¿Tantísimo os aburrís? ¿O se trata de que ya tenéis tan arraigada esa costumbre que ya no sabéis vivir sin ella?

 Como sea... sí espero que los próximos rumores sean más creativos, en serio, así vosotros los pasaréis mejor creándolos y yo descojonándome de ellos.

Gracias por vuestro tiempo.



Lady Yцϰєα

miércoles, 26 de marzo de 2014

27 - 03 - 2014

"Imaginando lo que sería estar atrapada en una pesadilla pude averiguar que el problema de mi pesadilla era que tú no estabas allí."

Susurros en el viento de un amor que la distancia no ha podido anular.
"Estás aquí. Te noto en cada latir."

Aunque no pueda verte, cada vez que cierro los ojos pienso que estamos juntos otra vez.
No hay km suficientes que me separen de ti, ni rumores que me hagan desconfiar, ni personas que eliminen tu pensamiento... ni siquiera hay tristeza si sé que estás bien, aunque te eche de menos, aunque sepa que querré tus abrazos, aunque necesite tus caricias... pues sé que, por mucha distancia que haya, tú nunca te irás de mi mente.


Hoy escribo esto mientras mi mente reproduce tu perfume, tu sonrisa, tu mirada, tu calor, tu dulce voz y la forma en que late tu gran corazón... y no puedo evitar sonreír como una boba mientras miro aquél anillo que me regalaste la primera vez que nos separamos tanto tiempo, pensando en la maravillosa sensación que experimenté cuando volví a estar entre tus brazos y pude besarte de nuevo.

Aquella época aprendí que no me importaba cuánto tiempo te fueses siempre y cuando volvieses a por mí o yo pudiere ir a buscarte.
También aprendí que no tenía nada más que temer, tú estabas a mi lado constantemente, del mismo modo que yo estaba ahí para ti.

Esta noche no me siento triste, ni melancólica, ni siquiera pienso en que pueda sentirme mal en ningún momento... aunque te extrañe, te llevo dentro; aunque seas más alto que yo, puedo verte desde el ángulo que quiera; aunque no oiga tu voz, mi mente la reproduce cuando me escribes del modo en el que sólo tú sabes hacerlo y, aunque no sienta tu calor, mi corazón sigue latiendo al ritmo del tuyo.




Te amé una vez; pero luego lo entendí.
Sólo fue eso.
Una vez.

lunes, 27 de enero de 2014

27 - 01 - 2014

Llevo mucho tiempo sin escribir en el blog; últimamente me he aficionado a escribir en libretas y en redes sociales de forma ligera y breve. No es que sea lo mismo; pero he sentido la necesidad de hacerlo de un modo directo y esperando que sirviese de algo para las personas que no suelen leer esto; pero sí mi fb o mi twt.

El caso es que aunque esté enferma, aunque esté sin poder salir por riesgo de empeorar y tenga que cuidarme muchísimo últimamente; estoy bien por lo que viene siendo yo misma; pero no por personas muy importantes para mí y que tienen mucha pena encima.

Quienes me conocen saben que, aunque yo esté mal, siempre estoy dispuesta a escuchar a una persona que realmente necesita ayuda (y la pide por su bien y no por llamar la atención sin más, que quede claro) y esto no ha cambiado estos días que he estado mala y sigo con ello.

No voy a dar nombres, ni a contar detalles; pero sí quiero decirles algo a estas personas a las que tanto quiero y necesitan apoyo y ánimo estos días.

Las cosas siempre pueden torcerse mucho, pueden empeorar, pueden ser agotadoras, pueden romperte el alma, pueden ser dolorosas... puede haber de todo; pero, tarde o temprano, de todo se sale y hay que mantenerse en pie pase lo que pase; esto no quiere decir que no podáis tomaros vuestro tiempo para levantaros de las caídas, porque caeréis; pero no podéis dejar de pensar en levantaros y continuar.


Hoy escribo esto mientras unas lágrimas de rabia e impotencia recorren mi rostro.

Esta vida es muy dura y esta lección la he aprendido de un mal modo (aunque, por suerte, no del peor ni de lejos); he aguantado muchas cosas malas, algunas se saben y otras me las llevaré conmigo a la tumba, he intentado hacer las cosas de la mejor manera posible (pero eso no siempre se puede, todos lo sabemos) y he actuado como he creído conveniente según cada situación.

Por otra parte, sé que mis actos no siempre son bien vistos, sé que a la gente le molesta que me guarde las cosas, sé que a algunos les duele que cuando esté enferma no quiera dar señales de vida, sé que muchos me critican porque me callo las cosas hasta que no puedo más y las grito al mundo; sé todo eso, no soy tonta y sé que queréis que lo cambie... pero no soy así y, si tengo que cambiarlo, lo haré por mis propios motivos.


A lo que quiero llegar es a que, por duro que sea todo a veces, no quiero que os rindáis.
Sé que es egoísta, sé que no tengo derecho a pedirlo; pero es lo que siento y lo que quiero, de modo que, mientras tengáis fuerzas y una persona que os anime y apoye no os déis por vencidos, por favor.

 Gracias por vuestro tiempo.


Lady Yцϰєα

domingo, 15 de septiembre de 2013

16 - 09 - 2013

Hace un año estaba tomando una de las peores (aunque a su vez de las mejores) decisiones de toda mi vida.

Me dispuse a cometer locuras, aprovechar el poco tiempo que me quedaba de vacaciones para salir, estar con mis amigos, probar cosas nuevas que no se me hubiesen ocurrido de normal, etc...

El caso es que llegó la locura máxima: la típica locura de la que te advierten mil veces y, aunque sabes que tienen razón, la cometes sí o sí porque algo te dice que lo necesitas, que es algo vital para ti.
Y así fue.

No voy a dedicarme a contar la locura en cuestión, lo siento, lo de los cotilleos no es algo que me vaya en exceso, espero que lo comprendáis... pero sí diré que esa locura me llevó de pleno ante la persona más increíble que he conocido en mi vida.


Una persona que ya conocía de niña y de la que estuve separada durante doce años, alguien a quien apenas recordaba; pero que, en muy poco tiempo, consiguió un puesto imposible de olvidar...
Un ángel que me ayudó a ser la persona que siempre quise volver a ser.


Después de mucho tiempo, me recordó cosas que había olvidado y me enseñó otras tantas nuevas que no creí que pudieren ser realmente; jugamos al mirar la vista atrás y ambos ganamos:
Yo, su sonrisa; él, mi corazón.


A día de hoy puedo decir que, casi un año después, sigo enamorada de esta persona y cada día que pasa este sentimiento es más fuerte y más bello. 

Después de conocer a esta persona (y de tenerla a mi lado fielmente durante casi un año), puedo decir muchas cosas; pero las verdaderamente importantes y, por tanto, las tres únicas que voy a decir son las siguientes:

He vivido engañada entre falsas promesas de muchas personas. Y no me refiero sólo a "amorosamente" hablando.

Siempre que una persona me ha pedido confianza se la he dado. Y la mayoría de las veces ni se la merecía.

Mi forma de ser tuvo que guardarse bajo candado, al igual que mi forma de pensar; la envidia es muy mala y los hay que no aceptan que haya independencia a la hora de opinar.


Y aquí acabo con mi pequeña reflexión:
Hoy puedo decir que me da igual haber aguantado todo lo que me ha tocado y que no tengo (ni quiero tampoco) por qué callarme nada; aunque mi felicidad y sinceridad puedan joder a más de uno.


Gracias por vuestro tiempo.

Lady Yцϰєα

lunes, 3 de junio de 2013

04 - 06 - 2013

LLevo tiempo queriendo decir varias cosas y no sé ni por dónde ni cómo empezar...

Supongo que lo más sencillo, la mayoría de las veces, es decir un "necesito desahogarme".

Y es lo que voy a hacer:

Necesito desahogarme.
Quedan apenas unos días para mi cumpleaños, sí, otra vez vuelve el evento... esta vez sí voy a celebrarlo y estaré con las personas que más quiero, esta vez... las de verdad.

Tengo una muy mala temporada últimamente; y es una verdad como un templo.
Aguanto porque tengo personas increíbles a mi lado apoyándome; pero últimamente siento que necesito algo más de soledad, no sé el motivo exacto; pero sé que no todo va bien y que para arreglar las cosas lo primero que necesito es estar sola y aclarar mis pensamientos, sentimientos e ideas.


He pasado por muchas cosas, lo admito (no es fácil pensarlo si quiera), y no he dejado de luchar, quizá haya hecho pausas, quizá me haya caído, quizá me tropecé con más de una piedra en mi camino... pero aquí sigo, andando mi recorrido.

Recuerdo que hace unos diez u once meses... alguien me dijo que no era la persona que había conocido; en su momento ni le dí mayor importancia.
Hoy estuve reflexionando sobre aquello y... en aquél entonces no; pero, actualmente, sí puedo afirmar que no soy la persona que conoció.


No sé si algún día leerá estas palabras dicha persona; pero sí puedo asegurarle algo...

Nunca volveré a ser aquella persona que conociste por una sencilla razón... esa parte de mí murió el día 10 de julio de 2012.
Y, no fue a propósito por tu parte; pero tanto tú, como ella (sobre todo ella), tuvisteis la culpa de que así fuera.

Ha pasado muchísimo tiempo desde entonces... y ya no le doy más importancia; sé que tú tampoco; pero no puedo decir lo mismo de ella... así que hoy te diré también que no fui yo la inmadura, ni la cobarde, ni ninguna de todas las cosas que me llamaste en aquella noche... sólo fui la que no estaba dispuesta a dejarse embaucar porque sabía que aquello no era real.

Pero hoy soy la que se alegra de que así haya sido todo.


Nunca te guardaré rencor; pero no deseo volver a tener tu amistad.
Nunca dejaré de desear que te pase lo mejor; pero no cerca de mí.

Nunca me arrepentiré de haber vivido aquello contigo; pero jamás querré que se vuelva a repetir.
Eres parte de mi pasado; pero eso es todo, no dejaré que vuelvas a mí.

Y si ella llega a leer esto alguna vez, decirle sólo que mala suerte.
Tú me diste la razón en que había una fuerza que equilibraba el universo... todo el sufrimiento que tienes, es el que un día trataste de hacerme a mí. Espero que lo disfrutes.


También querría decirle más cosas a más personas... pero, siendo sincera, creo que esto ya ha sido suficiente por hoy...

Gracias por vuestro tiempo.

Lady Yцϰєα

miércoles, 22 de mayo de 2013

23 - 05 - 2013

"Todos los días te levantas, miras al espejo, sonríes a esa persona desconocida que se postra frente a ti y le dices optimista: hoy va a ser un día diferente."


¿Te suena esta situación?
A mí sí. Todos los días hago lomismo al levantarme de la cama, diría al despertarme; pero bendito insomnio... 


Siempre que hablo de este extraño hábito, la gente me mira raro y me pregunta si es cierto que hago esto diariamente. Sé que cuesta creerlo; pero así es, tengo rutinas tontas como ésta y otras aún más importantes como tomarme un pequeño desayuno para empezar bien el día o el de tomar cosas con azúcar cuando voy a ponerme a estudiar.

 A la gente le sorprende que alguien como yo tenga hábitos tan peculiares como el de cerrar los ojos y respirar hondo antes de empezar algo que considero importante o el de arañar mi piel cuando me siento impotente y no puedo hacer nada con respecto a una situación; pero, sin duda, la que más sorprende... es la de apartarme de alguien para que pueda ir tras lo que quiere.


Normalmente me dicen "¿pero tú crees que realmente será feliz apartándote y yendo tras ese objetivo?", francamente, en esos momentos, sólo sé contestar una cosa:
¿Para qué apartarme si puedo dejarles la vía libre?



Lo lógico sería pensar que, si realmente quieren que esté a su lado, en ningún momento se planteen la posibilidad de dejarme ir, independientemente de sus metas, sueños o deseos; que me vean como una aliada y no como una amenaza que les impida volar lejos.
Pero no entienden que el alzar el vuelo es necesario, incluso caerse cuando tratas de aprender al principio; pero, cuando por fin lo dominas y puedes volar lejos... si realmente hay algo que les merezca la pena atrás, no se irán sin llevarlo en su brújula.



Sé que a la mitad ni os interesa esto; pero no me importa alejarme de alguien si así va a ser feliz.
Lo he hecho previamente y, tarde o temprano, las personas de las que me aparto acaban volviendo a mí. No sé si es casualidad, desesperación o nobleza; pero siempre acaba pasando.

No me importa lo más minimo; a decir verdad, si esto pasa es por algún motivo, ¿no?



Hay gente que me odiará el resto de su vida, por motivos que quizá no sepan en totalidad qué los causó realmente; gente que me envidiará por haber sabido apreciar lo que ellos desecharon como si fuese un papel en sucio que ya no quieren usar; gente que me insultará porque no comparto sus métodos o ideas; gente que me despreciará porque no visto como ellos... Habrá de todo; así como este tipo de gente existirá siempre... también los habrá que me quieran y acepten por lo que soy:

Yo misma. 


No sé si debe preocuparme o no lo que opinen los demás; pero sé que no voy a empezar a cuestionármelo ahora.

Gracias por vuestro tiempo.


Lady Yцϰєα